Qué tanto has hecho en estos últimos días, que has cosechado, que has resuelto, que otro nuevo problema ataca tus pensamientos. Cuántas cosas nuevas has aprendido, cuantas innecesarias has olvidado. Cúantas cosas has hecho y cúantas has dejado de hacer, cúanto tiempo te has detenido y has pensado en hace un instante, en el ayer, en mañana. Cúantas cosas han pasado ante tus ojos y cúantas de ellas has percibido, cuántas se han quedado clavadas en tu memoria como un instante epifánico que jamás vas a olvidar. Cúantas nuevas caras has visto, ha cuales les has sonreído, cuales han sido las nuevas tierras que has conquistado. Recuerdas la última vez que sentiste que no estabas a punto de morir, y que estabas a un paso del cielo?.
Yo recuerdo muchas cosas, pero no tantas como qusiera, la mitad de ellas se me han escapado con cada respiro, ya no recuerdo nada de lo anterior mencionado, siento que simplemente todo se desvanece y no me quedan ya fuerzas para correr detrás del tiempo. Ha pasado tanto y no he retenido nada que ya no tengo tiempo de preguntar la pregunta obvia. Mis pensamientos se han quedado estancados en un par de imágenes que ni siquiera se pueden diferenciar, son borrosas, cambian constantemente, como el clima, y se unen y se separan y solamente se postran ahí, siempre ahí, esperando, o quizás burlándose y simplemente jugando a ser descubiertas. Mi tiempo se ha ido en tratar de alcanzarlas, no sé ni siquiera qué es lo que estoy persiguiendo, no sé ni siquiera qué es lo que me espera una vez logre alcanzarlas. Ni siquiera sé ya que es lo que estoy tratando de alcanzar.
Y mientras tanto todo lo demás, esa la vida, pasa despiadada sin darme espera, y han pasado tantas y tantas corrientes que ya no recuerdo ni dónde me encuentro ahora. Tengo ya tan poco tiempo, siento que dentro de poco no habrá mucho más que hacer, no habrá que huir a ningún otro lado, porque no habrá sitio a dónde hacerlo, el tiempo se va agotando y no logro ver aquellas imágenes que se encuentran siempre ahí, si ahí, en frente. Son tan viejas que ya no sé ni siquiera que son, o si siguen siendo las mismas que solían ser, o como las creé. Pero ya no importa igual ya no queda mucho, dentro de poco, no valdrá la pena ni pensar en ello, no tendrá sentido, todo terminará abruptamente y tendré que tomar otro camino.
No queda mucho tiempo, siento que poco a poco se acaba, no quedan ya demasiadas ansías, el tiempo no pasa en vano, las cosas van cambiando de color, el color va cambiando las cosas, ya nada es igual a como solía ser y cada vez es más difícil volver a ser lo que se era, nada me lo permite, todo ha girado alrededor y quizás ni siquiera yo me he dado cuenta, me he quedado ahí, siempre ahí, luchando por tratar de alcanzarlas, teniendo fe aún en que podía lograrlo, pero solamente he tratdo de detener el tiempo de cierta manera, creyendo que podía hacerlo, y ahora queda muy poco.
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