4/6/09

El gusto del porno

Creo que todos, o por lo menos la gran mayoría han visto aunque sea un minuto de una película porno en su vida. El que diga que no o es un gran mentiroso o tiene algo malo en la cabeza. Ver porno es natural, de hecho creería yo que más natural que ver novelas sin sentido y otras cosas que dan por TV y otros medios. El porno de alguna manera es algo real, natural, algo que en términos generales todo el mundo hace, tener relaciones sexuales, con su pareja, amante o como se quiera llamar. Y el porno como una película del holocausto u otras es simplemente la representación de ese tipo de actos privados.

El porno es de las industrias que más da dinero en el mundo, junto con las drogas y la guerra, supongo que las drogas irían en primer lugar pero eso es lo de menos. Pero que atractivo puede tener el porno para el resto de las personas. Yo diría que muchos. El porno para comenzar es como una comedia romántica, todo el mundo sabe en qué va a terminar la película, en eso el sí el porno no tiene ningún tipo de contrincante frente a su obviedad, es demasiado obvio como para tratar de enredarlo más. Pero también es un punto positivo por lo menos no se enredan con historias que comienzan prometedoras y luego salen decepcionantes. Las tramas del porno son exageradamente sencillas, para que una persona hasta con menos de un dedo de frente las entienda, pero van a lo que van y no cubren muchos campos intelectuales ni pretenden mayor cosa en el espectador. Las tramas del porno son patéticas eso sí, guiones sin sentido, diálogos monosilábicos y que quedan como incompletos, sin obviamente nombrar la poca calidad actoral de los "actores" porno. Pero como dije el porno va a lo que va sin rodeos, y eso señoras y señores para mí es algo que muchas veces es más valorable que perder dos horas en una película que promete y al final se queda en mucho tilin tilin y nada de paletas. El porno llega a las paletas a pesar de que el tilín tilín es bastante malo.

Yo veo porno, no todos los días ni a toda hora, pero no niego que por temporadas veo porno y he visto por mucho tiempo, solo y acompañado. Generalmente uno ve porno en la noche, en mi caso, algunas veces en la mañana y muy muy pocas veces en horas de la tarde. Pero la noche, como la costumbre de los actos sexuales, es como el momento propicio para las dos cosas, ver y hacer. De las películas o escenas que he visto alrededor de mi vida de porno creo que no podría rescatar ninguna, ni historia, ni diálogos, ni actuaciones dignas de un premio. Pero conozco un amigo que dice que a él si le gustan las tramas de la historia y el desenlace, evidente, de estas. Yo prefiero saltarme eso no me interesa o quizás es que ya he visto mucho y he quemado todas esas fantasías, clichés del hombre y representadas en el porno, como la enfermera, colegiala, empleada del servicio, vecina, etc. Y bueno por el lado de las mujeres el plomero, repartidor de pizzas, un clásico, policía, bombero, vecino, etc. Quizás por eso no me interesa mucho la trama, el abanico de personajes es bastante precario en este tipo de cine.

Además de esto el porno tiene su ciencia, la mayoría de las películas siguen el mismo patrón, vuelvo y repito como cualquier comedia romántica o telenovela de aquí y cualquier país. Siempre se comienza por la misma posición, se pasa a una segunda, una tercera y el gran finale generalmente siempre es el mismo. Hay otro cliché que creo yo implementó esta industria y es que las mujeres en el noventa por ciento de los casos siempre queda desnuda pero con unos zapatos con tacones inmensos, exageradamente incómodos, que por alguna razón nunca se quitan. Los "vestidos" que llevan estas actrices por alguna razón siempre se pueden quitar sin necesidad de quitarse semejantes monstruosidades de zapatos. Alguna vez alguien me dijo que eso es un fetiche para los hombres, en mi caso no lo es, y aunque en el video no se ve mal tampoco puedo decir que me parezca algo cómodo y necesario para el desarrollo de una escena, aunque muchas veces los zapatos tienen un protagonismo inesperado.

Es como las escenografías, siempre son cuartos de hotel, piscinas, camas, escaleras, cocina, sofás, pisos, y cualquier lugar para mi ya normal en dónde se pueden tener relaciones sexuales. En otros casos hay callejones, la típica escena de policía o sitios más exóticos como montañas, playas y bosques, cuando la película tiene el presupuesto necesario para poder lograr ese tipo de salidas de campo con el cuerpo técnico.

Por otro lado vienen los planos. A mi me gustan los planos generales, no me gustan los acercamientos a las áreas genitales, no me producen ningún tipo de excitación, de hecho a veces es hasta algo desagradable. Prefiero ver algunas posiciones más que otras y de esas que no me gusta ver es porque me gusta más hacerlas que verlas, quizás la imagen no me parece tan excitante en algunas poses como en otras y por eso prefiero hacerlas en vez de mirarlas. Es por eso que quizás me salto muchas partes de una escena o película por no ver esos planos o poses que no me llaman la atención. Otra parte importante del porno, como industria claro, son los actores. Los clichés máximos de la "belleza" masculina y femenina, dentro de los cánones de el país del norte y no importa la naturalidad sino lo que se vende. Por lo tanto creo que ninguna verdadera estrella porno es natural. Entre los actores quizás sea menor el bisturí pero seguramente habrá más de uno que tampoco sea completamente natural. Esto pues obviamente es para vender, como lo hacen en otros medios solamente que sin la parte del sexo, y pues de alguna manera eso le da atractivo tanto para hombres como para mujeres. Creo que todo hombre y toda mujer que haya visto algo de porno medianamente bien hecho ha querido tener sexo con un actor porno y el hombre con una actriz. No me refiero propiamente al actor o actriz como tal, sino con alguien que se vea similar a eso que vemos en pantalla. Como alguna de esas fantasías que alguien puede tener.

Otro aspecto importante del porno es la representación del acto sexual. Existe mucho tipo de porno que no pienso discutir, alguno más suave, otro menos suave y alguno ya un poco pasado para algunos gustos. Pero todo hombre y creo que muchas mujeres de alguna manera quieren ser como los actores porno en la intimidad, o sea con sus parejas. Por aquí hay un dicho vulgar que dice "como una dama en la casa y como una perra en la cama". Y creo que tanto hombres como mujeres de alguna manera quisieran ser así aunque sea por momentos en sus relaciones de pareja, tanto que el hombre parezca un actor porno como que una mujer sea una actriz porno. No me refiero al cien por ciento del tiempo, ni que sea algo que uno realmente desee ser siempre, por lo menos no en mi caso, pero a veces uno si quisiera poder tener por momentos ese tipo de desempeño, obviamente hollywoodense y falso, de los actores porno y demás. Pero claro ya está visto que todo eso es un mito, mucho Hollywood, y que la cosa en la vida real en cuanto al sexo no se parece en mucho a una película porno y a veces mucho menos a una erótica. Pero el porno hace parte de la cultura popular y esta colado en casi todos los aspectos de la vida cotidiana de pareja o personal de cada persona y es algo que de alguna manera no se puede evitar y tampoco hay necesidad de hacerlo.

En el porno claro también cuenta el desempeño actoral, o sea los gritos tanto de mujeres y hombres mientras realizan un acto netamente sexual, sin emoción, aunque el libreto trate de decirnos que hay algo mucho más profundo. Los gritos en el porno son claves, el porno sin gritos es como una película de ciencia ficción sin efectos especiales, pierde toda la gracia. El porno es lento, repetitivo y poco excitante, después de que uno ya se ha excitado claro, y pasa a ser algo monótono con un final predecible y ambientes bastante aburridos y lo mismo de siempre. Sin embargo el grito, fingido supongo que el noventa y nueve por ciento de las voces, tanto de mujeres y hombres, le da esa emoción momentánea a la escena y le da ese toque real porno a la película. Sin gritos el porno sería un fracaso, como esas películas B en dónde tienen relaciones sexuales sin decirse una palabra y sin un medio gemido de fondo, eso ya no es porno, sería cine erótico o algo parecido.

El porno está hecho para eso, gritar, desear, excitar obviamente y repetir lo que los acotres hacen en la película con nuestra pareja, en muchos casos el porno me ha ayudado a ese tipo de cosas, como para salir de la rutina que llaman y aunque ya no aprendo mayor cosa del porno en algún momento si me dio uno que otro dato que no conocía para ser aplicado en mis relaciones. De ahí en adelante como dije antes pues es algo monótono, predecible y bastante clichesudo. Pero a la final el porno cumple su función social, cada uno verá cuál es esa función en su caso y cada uno verá como ve y siente el porno, cada uno a su manera claro. En mi caso no lo disfruto como antes, pero de alguna manera es como ese de vez en cuando como cuando uno se ve una película que sabe que va a salir malísima pero sin embargo uno la ve como por pasar el rato. El porno creo que es el pasar el rato de muchos, si creo que más de hombres que de mujeres, pero igual hay muejres que ven bastante porno, solas o acompañadas. Hombre que niegue tener porno en su computador o en algún DVD quemado por ahí no es de fiar. Por lo menos que reconozca que alguna vez lo tuvo, porque seguro que todo hombre ha tenido o tiene porno en su computador, claro dependiendo del uso que se le de también a este y las posibilidades de uso personal. Pero igual todos lo han tenido o lo tienen y todos han bajado películas y muchos videos por internet no sólo por ver porno y quizás excitarse o verlo con su pareja sino para investigar, digámoslo así, de esas leyendas urbanas que se oyen con respecto a posiciones, fantasías, artilugios y demás que rondan el sexo, y que seguramente encontrarán al buscar alguna película con esas características.

Ahora, muchas veces me he preguntado si existirá el porno arte, quizás si lo haya y quizás haya visto alguna escena o película pero para mí no paso de ser una película porno normal. Ahora quizás el cine erótico sea esa contraparte del porno, pero el cine erótico muchas veces me parece peor que el porno ya que son películas con considerable extensión con las mismas tramas ridículas, a veces hasta peores, con muchas escenas innecesarias, tanto sexuales como no sexuales, que hacen que sea todavía más aburrido ver una película de estas. Prefiero el porno simple, no son tan exageradas las tramas ni la extensión de la película como tal y en útlimas una vez cumpla su objetivo uno puede dejar de ver la película sin sentir el remordimiento de no saber en que va a terminar, como si ocurre u ocurriría con una película de cine erótico que uno pensaría que llegará a algo medianamente coherente y no tan obvio, y que usualmente no sucede tampoco, pero como es cine y no vil porno como que a uno le queda la duda de saber que pasará.

El porno sirve y me parece que hace parte de la educación sexual de cualquier persona mentalmente sana y normal que quiere descurirse o aprender del sexo opuesto y demás. No digo que sea la mejor escuela, porque evidentemente el porno es demasiado básico en su mayoría como para generar erotismo y sensualidad muchas veces. Pero en los aspectos más carnales si me parece que debe hacer parte de la eduación sexual tanto masculina como femenina y si se toma con la naturalidad que se debe no debería generar tanta repulsión como aún la tiene, lo cuál obviamente hace que se mantenga en su status y siga siendo una poderosa industria, ya que es como tabú. Debo aclarar que me refiero al porno adulto, no estoy de acuerdo con el porno infantil, ni con cosas que atenten contra la integridad humana o denigren a las personas al hacer ciertos actos o cosas en las películas. Hablo de un porno con todos los ingredientes normales que debe poseer.

Ahora hacer una película porno o algo por el estilo, como se ha puesto de moda por las parejas normales que graban sus relaciones y demás, es otra cosa y eso aunque me parece mucho mejor que el porno, ya que es natural y verdadero, si va mucho con la personalidad de cada quién y cómo y dónde coloque el video y las razones por las cuales lo haga. En lo personal no digo que no grabaría algún video, pero no lo pondría a rotar en internet y no porque millones de personas me vean, la verdad eso poco me preocupa ya que nadie sabrá quién soy y cualquier comentario se quedara entre esa persona y lo que vea. Y tampoco porque alguien pueda reconocerme en la calle porque me vió en internet, esa posibilidad es demasiado remota que no me preocupa. No lo haría por principios personales, me parece que el sexo es algo muy personal y que se comparte con la persona con la que se hace y claro entre pareja se puede uno filmar y verse y demás, pero hasta ahí, de ahí en adelante lo que yo haga o deje de hacer o cómo lo haga no tiene mayor relevancia ni debe tenerla para nadie. Pero igual para no correr riesgos de que por venganza, despecho y/u otras circunstancias alguna vez el video sea expuesto a alguien cercano o algo, prefiero no hacerlo como hasta ahora no lo he hecho. Pero quien quita que algún día lo haga, no dscarto la posibilidad.

El porno es importante creo yo, para todo eso que dicen monotonía, falta de creatividad, de hacer cosas nuevas en la cama, y puede ayudar, y a mí me ha ayudado a veces ha tener ganas, querer hacerlo y pues algo también se ha aprendido. Eso sí la calidad de la pornografía no ha cambiado desde que se inventó, que no sé cuando fue eso, y las historias de los años setenta son las mismas que ahora y el prototipo y todo lo demás sigue siendo exactamente igual. Irónicamente a diferencia de otras cosas esto a esta industria le ha funcionado y no han tenido que cambiar su modus operandi, bien por ellos diría yo. Pero a pesar de lo ridículo del porno como espectáculo, negocio y cliché, creo que hace parte de la personalidad de una persona y del desarrollo sexual normal de ésta y se debería ver más porno en pareja, porque creo que eso aunque se hace no es mucho, y a veces perder ese mismo pudor que uno tiene, que se supone no se debería tener, con la persona que uno ama, o quiere. Igual el porno es como cualquier corín tellado, comedia romántica o telenovela, solamente que se mete un poco en otros aspectos de la vida cotidiana que creo yo nunca serán expuestos tan abiertamente, pero así como de vez en cuando uno ve una película de Hugh Grant o Meg Ryan y algunos capítulos de alguna telenovela ridícula colombiana, mexicana o venezolana, pues porque no ver alguna película o escena porno, al fin y al cabo es la misma cosa solo que para otros momentos.

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